Lo que hoy conocemos como el Museo de Arte Moderno fue en sus inicios la Casa de la Temperancia que a finales del siglo XIX, fue construida por orden del Obispo Miguel León como un refugio para la rehabilitación y la cura de personas con problemas de alcoholismo.  .

De acuerdo al libro Guía de Arquitectura, de Miguel Moreno, desde 1924 hasta 1939, en esta edificación funcionó la cárcel municipal de varones. En ese entonces el inmueble sufrió desgastes, por lo que se decidió que la casa pase a manos de la Junta de Asistencia Social, destinándose así las dependencias a obras de caridad y a dar cabida en ellas a un asilo de ancianos. Posteriormente pasó a funcionar la institución solidaria denominada Gota de Leche, que ayudaba a las madres de escasos recursos económicos.

A finales de los años 70 se pensó en derribar el inmueble debido a su notable deterioro, sin embargo intelectuales como el investigador Hernán Crespo y el pintor Luis Crespo Ordóñez intervinieron para que en esta edificación se adecúe un museo  y es así como en 1778 la Municipalidad de Cuenca inició el proyecto de restauración con tal propósito. Los trabajos fueron dirigidos por el arquitecto Patricio Muñoz Vega respetando al máximo las características y elementos arquitectónicos de la edificación.

El Museo de Arte Moderno abrió sus puertas el 1 de agosto de 1981 bajo la dirección de Eudoxia Estrella, quien permaneció por 33 años en este cargo. Hoy esta casa se caracteriza por ser la sede de la Bienal Internacional de Cuenca y un importante punto de difusión del arte moderno y contemporáneo de Ecuador y el mundo, a través de exhibiciones temporales que constantemente se realizan en sus salas.

El museo cuenta con un auditorio para conferencias, seminarios, conciertos y eventos varios, una biblioteca especializada en arte y una oficina de información. Se organizan también periódicamente talleres de arte dirigidos a niños.

Horario: Lunes a viernes de 8h30 a 13h00 y de 15h00 a 18h30; sábados y domingos de 9h00 a 13h00.